Depilación neurosedante, 2ª parte

Factores que influyen en el crecimiento del pelo

• Entre las hormonas que influyen directamente en el crecimiento del vello, los andrógenos y en especial la testosterona destacan como los estimulantes fundamentales.
   La secreción de las gónadas y las suprarrenales está determinada genéticamente por varios mecanismos. Por ejemplo, cuando se padece de insuficiencia hipofisaria o de las suprarrenales, el pelo corporal disminuye o está
ausente. Fuera de posibles desarreglos orgánicos, la falta de vello puede deberse simplemente a la constitución genética del individuo.
• El aumento y desarrollo del vello también depende de diversas hormonas masculinizantes (andrógenos) circulantes en la piel, así como la sensibilidad del folículo piloso (la raíz del pelo) en dicha área.
   Asimismo, su crecimiento está determinado por el tiempo durante el cual los folículos se han expuesto a la acción de los andrógenos.
   Otro factor que influye directamente en dicho crecimiento es el ciclo de recambio del pelo. Así, el pelo de la cara y del cuero cabelludo tiene un biorritmo de recambio más lento. El pelo axilar y púbico es muy sensible a la acción de los andrógenos y tiene un biorritmo de recambio más rápido, que disminuye progresivamente con la edad.
• La edad es uno de los factores que determinan la aparición o disminución de la pilosidad en el cuerpo. A nivel interno, existen diversos trastornos de la salud que favorecen el aumento del vello.
   Por ejemplo, la piel metaboliza y puede transformar diversas hormonas en testosterona, androsterona y otros esteroides, a través de varios procesos enzimáticos que se desarrollan fundamentalmente en las glándulas sebáceas. Tanto dentro como sobre la piel y el pelo se han detectado hormonas femeninas (esteroides) y
masculinas (andrógenos).
   A nivel externo, cuando se produce incremento metabólico de la testosterona en los tejidos extrahepáticos, se puede observar un desarrollo mayor de la pilosidad del cuerpo en la mujer, así como una disminución del pelo en el cuero cabelludo. En los tratamientos destinados a disminuir el vello corporal se debe aplicar un tratamiento biológico drenador y regenerador hepático.

El ciclo de crecimiento del pelo

   El pelo es una estructura en constante recambio, que sufre ciclos y fases de crecimiento, reposo y caída. Los biociclos varían en función de la edad del individuo y la región del cuerpo y los ritmos de crecimiento pueden cambiar por diversos factores fisiológicos y patológicos. Éstos constan de tres fases:
• Fase anágena o de nacimiento.
• Fase catágena o de desarrollo.
• Fase telógena, de muerte y caída.
                                                          Sustancias y crecimiento
• Los estrógenos reducen el índice de crecimiento del pelo en su fase anágena, pero en cambio prologan la duración de la fase catágena. El aminoácido tirosina, que puede presentarse en la orina, en determinadas enfermedades del hígado adelanta la fase anágena en los folículos, mientras que la cortisona atrasa esta etapa.
• Las heridas e irritaciones causan el crecimiento del pelo y sus proximidades, porque cualquier acción que favorece la hiperplasia epitelial (formación excesiva de tejido) estimula el pelo en su fase anágena.
• Las alteraciones inflamatorias y las infecciones de carácter micótico (hongos) favorecen en general el desarrollo del pelo telógeno alrededor de la lesión, contribuyendo a limitar la infección de la misma. Por ello es muy importante escoger un método de depilación que no provoque irritaciones.
• Los episodios de tensión emocional y en particular, los estados depresivos, pueden dar lugar a un aumento sustancial del vello.

La Epilación es el método de eliminar el vello desde la raíz, mientras que la depilación consiste en cortar el vello a flor de piel.

El hirsutismo

   Se utiliza el término “hirsutismo” cuando se observa un excesivo crecimiento del pelo terminal en cuanto a grosor, longitud y cantidad y/o cuando el crecimiento piloso viene determinado por la estimulación de las hormonas andrógenas (masculinizantes), como ocurre en el labio superior, el mentón o la parte superior de los brazos.
Causas del hirsutismo
   El crecimiento excesivo del vello puede ser de orden no endocrino:
• Hirsutismo racial o familiar. Cuando el estudio médico no revela ninguna alteración menstrual, hormonal, ni tampoco la disminución de la fertilidad, el hirsutismo puede deberse a factores hereditarios, sin que por ello determine unos desarreglos de la salud.
• El hirsutismo también puede provocar ansiedad en las mujeres que viven en un contexto social donde la imagen de la mujer con vello se asocia a un estado de virilización.
• Determinadas alteraciones ováricas pueden dar lugar a un aumento de vello algunos casos. Asimismo, el mal funcionamiento de las suprarrenales y los desarreglos hormonales también pueden ocasionar este incremento.
Diagnóstico del hirsutismo
   Antes de establecer un tratamiento interno y externo eficaz contra el hirsutismo, es conveniente realizar un diagnóstico completo sobre el estado’ de salud de la persona. Para este examen se tendrán en cuenta distintos parámetros, como la edad en que comienza a observarse el exceso de vello y la tipología del pelo, el carácter racial de la persona afectada y su historia menstrual minuciosa (en el caso de las mujeres), la existencia de acné o calvicie, de una obesidad o delgadez excesiva y el estado psicológico.
   También se tendrán en cuenta los factores hormonales, la temperatura cutánea local o la posible existencia de traumatismos, así como la posible administración de anabolizantes, cortisona, psoralenos, etc. (la penicilamina, por ejemplo, aumenta la longitud y la aspereza del pelo).