Cefaleas, 1ª parte

   El dolor de cabeza o cefalea es el síntoma más común de la humanidad y suele indicarnos la existencia de una enfermedad subyacente que hay que tratar. En un 90 % los casos pueden clasificarse como una contracción o tensión muscular provocada por un exceso de trabajo o un cúmulo de situaciones estresantes, aunque en otras ocasiones aparece por la propia herencia genética.

PAUTAS DE COMPORTAMIENTO

   Si eres una persona hipersensible, ordenada, metódica y perfeccionista, con un gran sentido de la responsabilidad, lo cual te lleva también a implicarte en las decisiones y obligaciones de los demás eres más propensa a padecer cefaleas.  Soportar cargas demasiado grandes provoca a menudo estrés, que es uno de los desencadenantes de las cefaleas.
Vivimos cada vez más con un ritmo demasiado acelerado, lo que inevitablemente pasa factura a nuestra salud y acaba comportando problemas. La cabeza es una de las partes de nuestro cuerpo que más lo nota. Aquí tienes algunos consejos:

> Cambia algunos de los hábitos de conducta que has ido adquiriendo con el tiempo.
> Aprende a disfrutar de todo lo que haces, tanto en tu vida personal como laboral.
> No soportes grandes cargas de responsabilidad y no te impliques más de la cuenta en todo lo que haces, pueden ser dos buenas maneras de empezar a preocuparte por tu integridad física y mental y de alejar el fantasma de las cefaleas.
> Vive según las normas que el sistema nervioso vegetativo dicta a tu cuerpo. Esta es otra buena manera de evitar que los dolores de cabeza acaben por impedirte hacer una vida normal.

Nos indica que en nuestro organismo se produce alguna disfunción y se acompaña de
hipersensibilidad sensorial

Consejos útiles

> ¡Cuidado con algunos alimentos! Aunque muchas veces no reparamos en los efectos de la dieta sobre los dolores de cabeza, la realidad es otra. Muchos alimentos predisponen al dolor de cabeza, por su contenido en nitritos (conservantes con acción vasodilatadora), glutamato monosódico (realzador del sabor que induce a la hiperexcitabilidad neuronal) y nitrita.
> Debes evitar... El chocolate, los cítricos, el queso, la cafeína, el alcohol, la mantequilla de cacahuete, el vinagre, el yogur, las levaduras y las carnes curadas. Recuerda que la ingesta de alcohol produce vasodilatación cerebral.
> Es recomendable... La ingesta de miel, que acelera la degradación metabólica del etanol.                                               

> También los contaminantes ambientales pueden tener un efecto indeseado en la generación del dolor de cabeza. Estos contaminantes comprenden a aquellas sustancias volátiles agresivas para el ser humano, y también a todo estímulo sensorial (visual, olfativo, auditivo) cuya intensidad se acerca o supera el umbral al dolor. La contaminación visual y auditiva en las grandes ciudades es también causa considerable de dolor de cabeza.
> Averigua si padeces algún problema óseo.
> Duerme las horas necesarias y en la posición correcta.
> Mantente en posición erguida y camina bien derecha/o.                                                                                                   

 > Evita los vapores y olores que puedan desencadenar una crisis.                                                                                               

> Protege los ojos de la luz intensa.
> Evita tomar el sol si te duele la cabeza.

   El dolor de cabeza es un síntoma, una señal de alerta que nos advierte que algo va mal en nuestro organismo, que se da en él alguna disfunción. Suele aparecer como consecuencia de un exceso de tensión, por falta de horas de sueño.., y se desarrolla con una serie de pequeños trastornos como la hipersensibilidad, la pesadez, la falta de concentración, congestión y el dolor generalizado en la frente, sienes y órganos sensoriales.
Cuando su origen es vascular podemos hablar de la temida migraña, cuya incidencia es mucho mayor en las mujeres, que la sufren en un 70% de los casos.

La sensibilidad a flor de piel

   El dolor de cabeza se acompaña habitualmente de hipersensibilidad sensorial. Se trata de una intolerancia los estímulos sensoriales que normalmente transcurrirían sin mayor importancia (por ejemplo, no se soporta el ruido, la luz o determinados olores). Estos estímulos se aprecian como si fueran mucho más exagerados e intensos, de modo que su percepción se convierte en un cúmulo de sensaciones dolorosas. Las fibras nerviosas transmiten la sensación original, siendo el trigémino el encargado de comunicar el dolor
Las causas...
  El trigémino es el órgano sensitivo que transmite la información de la cara, el cuero cabelludo y otras zonas cefálicas, y una de sus funciones consiste en liberar neuropéptidos, que favorecen el aumento del calibre de los vasos sanguíneos

   Cuando se da una sobreestimulación del trigémino, el incremento del volumen vascular comprime las membranas meníngeas que recubren el tejido nervioso, aumentando la presión intercraneana y causando dolor.
   La serotonina actúa sobre la actividad del trigémino ejerciendo una inhibición tónica. Cuando sus niveles disminuyen, el trigémino se vuelve hiperexcitable y aumenta la frecuencia de su descarga, ocasionando el ataque de dolor.
…y las consecuencias
   El trigémino inerva las células secretoras de mucus de la nariz, las glándulas lagrimales y las salivares, y los músculos de la masticación. Este es el motivo por el que, cuando se halla especialmente sensible -como ocurre en los casos de dolor de cabeza- aparecen como consecuencia el lagrimeo, la salivación... Éstas, reacciones típicas en las cefaleas, tienen como objeto reducir o eliminar la causa de la reacción sensorial.

La intensidad y la localización del dolor son los dos parámetros más importantes para valorar el tipo de Cefaleas producidas

Migraña

La Migraña es entre 3 y 4 veces más frecuente en mujeres que en hombres y suele aparecer antes de los 35 años

Características y localización

    Las Migrañas causan un dolor pulsátil e intenso, generalmente en un lado de la cabeza, aunque en el 40% de ellas el dolor es bilateral. A menudo se acompaña de náuseas y vómitos, sudoración fría, fonofobia y fotofobia (intolerancia a la luz y al sonido), y en ocasiones de temblores y mareos, así como síntomas previos.
   Entre estos síntomas destacan la deficiencia en la percepción del campo visual, visión borrosa o de luces centelleantes, sensación de cansancio y somnolencia y entumecimiento en las extremidades.
   Suele dividirse en tres etapas:
   La fase previa a la Migraña está marcada por la somnolencia y la sensación constante de cansancio. La persona estará nerviosa, excitada y puede llegar a padecer alteraciones bruscas del apetito (hambre incontrolada o desgana total), así como diarrea o estreñimiento y disminución en la segregación de saliva. Esta es la fase en la que se debe introducir un tratamiento eficaz si se quiere prevenir la progresión de la Migraña.
   En el segundo estadio de la migraña, el dolor se acentúa hasta llegar a ser insoportable. Con frecuencia también aparecerán en esta fase otros síntomas, como vómitos y una pérdida de líquidos.
   En la fase más aguda de la dolencia, el enfermo suele quedarse dormido, pues la crisis ya es de una intensidad insoportable.

Duración
   La migraña suele darse durante un periodo de entre 10 y 72 horas aproximadamente, mientras que la frecuencia con la que puede aparecer es muy variable.

Causas
   Entre los motivos por los que se da la migraña o “jaqueca” encontramos un marcado componente genético (la padecen varios miembros de una misma familia), aunque también pueden incidir en su aparición aspectos como el estrés, los cambios climáticos o la intolerancia hacia algunos alimentos.
   Esta afección, que es de 3 a 4 veces más frecuente en mujeres que en hombres, suele aparecer antes de los 35 años y se calcula que afecta entre un 3 y 5% de la población.