sábado, 22 de octubre de 2016

La Polinosis alérgica:Una forma de catarro alérgico, 2ª parte


¿Qué desencadena el catarro alérgico?
   El desencadenante directo del catarro alérgico es el polen de las plantas polinizadas (espolvoreadas) por el viento, que se produce en grandes cantidades. Por ejemplo, la cifra de polen liberalizado de una espiga de centeno, asciende a millones de partículas que, con el viento, se reparten a grandes zonas. Dado que 50 partículas de polen son suficientes para desencadenar molestias de Polinosis, es difícil protegerse de ellas.
   Se conocen algunos cientos de plantas cuyo polen puede desencadenar el catarro alérgico. Aunque la fecha de la floración es distinta según cada variedad, el vuelo del polen comienza entre los meses de febrero y abril, y su etapa principal transcurre entre abril y junio, cuando florecen los campos. Finalmente, la tercera fase de este proceso se da entre junio y agosto, cuando las flores de las hierbas se añaden a esta carga.


  Como se ha visto, la fase temporal de la liberación del polen de plantas alergizantes es predecible y el tiempo de aparición de las clases de polen que más usualmente conducen a la polinosis está ordenado en el calendario de vuelo del polen (ver mapa de polinización y cuadros). Este esquema puede ayudar a los afectados a determinar las etapas en las que las moles- das son más importantes.
   Pero además del calendario, hay otros factores que influyen en la extensión del polen, que pueden hacer variar las tablas, como por ejemplo el viento, los climas regionales o la altitud. También hay que tener en cuenta que, por ejemplo, en una región montañosa se debe contar con una liberación de polen más tardía, o que la concentración de éste en el aire también tiene una clara oscilación horaria, existiendo una concentración mayor en las horas tempranas de la mañana.

Otros factores
   Junto al polen hay otras sustancias que, durante el año, provocan catarro de tipo alérgico, como el polvo de la casa, los hongos o las excreciones de animales (perros, gatos, pájaros...).
   Las secreciones del ácaro del polvo de la casa se encuentran entre las sustancias principalmente causantes de la alergia. Este ácaro es un inquilino permanente del hombre, muy difícil de eliminar, que prefiere un entorno ligeramente húmedo y una buena temperatura, y que se alimenta de escamas de la piel, que por las noches caen en las sábanas.
   Las esporas y proteínas de hongos presentes en el aire de las habitaciones interiores de la casa también pueden ser desencadenantes de alergias. El moho se desarrolla preferentemente en sitios húmedos, calientes y oscuros, como las esquinas y nichos de cuartos de baño y sótanos, y algunas de las medidas arquitectónicas destinadas a proteger del ruido y del calor, favorecen las condiciones climáticas para la aparición habitual de estos “alergenos” potenciales.
   En los meses de julio y septiembre, las esporas de los hongos se forman en el “compost” y en las hojas caídas, lo que hace que en esta época del año empeoren ocasionalmente las molestias en los casos de catarros alérgicos que duran todo el año.


Cómo identificar los alérgenos
   La determinación exacta de los desencadenantes de la alergia en las sustancias es un método diagnóstico utilizado posteriormente para la creación de determinadas formas de terapia, como la hiposensibilización. Este proceso se puede realizar, por ejemplo, a través de un examen en la piel, depositando en ella diferentes “alergenos”, por ejemplo a través de pequeñas incisiones superficiales (arañazos). Si existe alergia a alguna de las sustancias aparece en la posición correspondiente una reacción inflamatoria con prurito, enrojecimiento y formación de un habón, de este modo se puede valorar el origen o las sustancias que mayormente inciden en el cuadro de hipersensibilidad de la persona.

 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario